jueves, 30 de enero de 2014

Tema 2.7 Formación Moral Básico (Pedagógico)

Tema 2.7
La Eucaristía

1) Ideas Principales
  • Jesús nos da su Cuerpo y su Sangre como alimento de salvación.
  • La concomitancia es la unión del cuerpo, sangre, alma y divinidad de Jesucristo presente en la Eucaristía.
  • Este Sacramento recibe varios nombres: Eucaristía, Banquete del Señor y Comunión.
  • A la Eucaristía le damos un culto de "latría" por ser Dios quien se hace presente.
  • La Transubstanciación (paso de una sustancia a otra)  es la acción de cambiar el pan y el vino en Cuerpo y Sangre de Cristo. Esta sucede durante la Consagración.
Preguntas:

1. ¿Qué es la Eucaristía?
La Eucaristía es el sacrificio mismo del Cuerpo y de la Sangre del Señor Jesús, que Él instituyó para perpetuar en los siglos, hasta su segunda venida, el sacrificio de la Cruz, confiando así a la Iglesia el memorial de su Muerte y Resurrección. Es signo de unidad, vínculo de caridad y banquete pascual, en el que se recibe a Cristo, el alma se llena de gracia y se nos da una prenda de la vida eterna.
2. ¿Cuándo instituyó Jesucristo la Eucaristía?
Jesucristo instituyó la Eucaristía el Jueves Santo, «la noche en que fue entregado» (1 Co 11, 23), mientras celebraba con sus Apóstoles la Última Cena.
3. ¿Cómo instituyó la Eucaristía?
Después de reunirse con los Apóstoles en el Cenáculo, Jesús tomó en sus manos el pan, lo partió y se lo dio, diciendo: «Tomad y comed todos de él, porque esto es mi Cuerpo que será entregado por vosotros». Después tomó en sus manos el cáliz con el vino y les dijo: «Tomad y bebed todos de él, porque éste es el cáliz de mi Sangre, Sangre de la Alianza nueva y eterna, que será derramada por vosotros y por todos los hombres, para el perdón de los pecados. Haced esto en conmemoración mía».
4. ¿Qué representa la Eucaristía en la vida de la Iglesia?
La Eucaristía es fuente y culmen de toda la vida cristiana. En ella alcanzan su cumbre la acción santificante de Dios sobre nosotros y nuestro culto a Él. La Eucaristía contiene todo el bien espiritual de la Iglesia: el mismo Cristo, nuestra Pascua. Expresa y produce la comunión en la vida divina y la unidad del Pueblo de Dios. Mediante la celebración eucarística nos unimos a la liturgia del cielo y anticipamos la vida eterna.
5. ¿Qué nombres recibe este sacramento?
La inagotable riqueza de este sacramento se expresa con diversos nombres, que evocan sus aspectos particulares. Los más comunes son: Eucaristía, Santa Misa, Cena del Señor, Fracción del Pan, Celebración Eucarística, Memorial de la Pasión, Muerte y Resurrección del Señor, Santo Sacrificio, Santa y Divina Liturgia, Santos Misterios, Santísimo Sacramento del Altar, Sagrada Comunión.
6. ¿Qué lugar ocupa la Eucaristía en el designio divino de salvación?
En la Antigua Alianza, la Eucaristía fue anunciada sobre todo en la cena pascual, celebrada cada año por los judíos con panes ázimos, como recuerdo de la salida apresurada y liberadora de Egipto. Jesús la anunció en sus enseñanzas y la instituyó celebrando con los Apóstoles la Última Cena durante un banquete pascual. La Iglesia, fiel al mandato del Señor: «Haced esto en memoria mía» (1 Co 11, 24), ha celebrado siempre la Eucaristía, especialmente el domingo, día de la resurrección de Jesús.
7. ¿Cómo se desarrolla la celebración de la Eucaristía?
La celebración eucarística se desarrolla en dos grandes momentos, que forman un solo acto de culto: la liturgia de la Palabra, que comprende la proclamación y la escucha de la Palabra de Dios; y la liturgia eucarística, que comprende la presentación del pan y del vino, la anáfora o plegaria eucarística, con las palabras de la consagración, y la comunión.
8. ¿Quién es el ministro de la celebración de la Eucaristía?
El ministro de la celebración de la Eucaristía es el sacerdote (obispo o presbítero), válidamente ordenado, que actúa en la persona de Cristo Cabeza y en nombre de la Iglesia.
9. ¿Cuáles son los elementos esenciales y necesarios para celebrar la Eucaristía?
Los elementos esenciales y necesarios para celebrar la Eucaristía son el pan de trigo y el vino de vid.
10. ¿En qué sentido la Eucaristía es memorial del sacrificio de Cristo?
La Eucaristía es memorial del sacrificio de Cristo, en el sentido de que hace presente y actual el sacrificio que Cristo ha ofrecido al Padre, una vez por todas, sobre la Cruz en favor de la humanidad. El carácter sacrificial de la Eucaristía se manifiesta en las mismas palabras de la institución: «Esto es mi Cuerpo que se entrega por vosotros» y «Este cáliz es la nueva alianza en mi Sangre que se derrama por vosotros» (Lc 22, 19-20). El sacrificio de la Cruz y el sacrificio de la Eucaristía son un único sacrificio. Son idénticas la víctima y el oferente, y sólo es distinto el modo de ofrecerse: de manera cruenta en la cruz, incruenta en la Eucaristía.
11. ¿De qué modo la Iglesia participa del Sacrificio eucarístico?
En la Eucaristía, el sacrificio de Cristo se hace también sacrificio de los miembros de su Cuerpo. La vida de los fieles, su alabanza, su sufrimiento, su oración y su trabajo se unen a los de Cristo. En cuanto sacrificio, la Eucaristía se ofrece también por todos los fieles, vivos y difuntos, en reparación de los pecados de todos los hombres y para obtener de Dios beneficios espirituales y temporales. También la Iglesia del cielo está unida a la ofrenda de Cristo.
12. ¿Cómo está Jesucristo presente en la Eucaristía?
Jesucristo está presente en la Eucaristía de modo único e incomparable. Está presente, en efecto, de modo verdadero, real y sustancial: con su Cuerpo y con su Sangre, con su Alma y su Divinidad. Cristo, todo entero, Dios y hombre, está presente en ella de manera sacramental, es decir, bajo las especies eucarísticas del pan y del vino.
13. ¿Qué significa transubstanciación?
Transubstanciación significa la conversión de toda la sustancia del pan en la sustancia del Cuerpo de Cristo, y de toda la sustancia del vino en la sustancia de su Sangre. Esta conversión se opera en la plegaria eucarística con la consagración, mediante la eficacia de la palabra de Cristo y de la acción del Espíritu Santo. Sin embargo, permanecen inalteradas las características sensibles del pan y del vino, esto es las «especies eucarísticas».
14. La fracción del pan, ¿divide a Cristo?
La fracción del pan no divide a Cristo: Él está presente todo e íntegro en cada especie eucarística y en cada una de sus partes.

2) Introducción.

 ¿A QUÉ VAMOS A MISA? 

 Nuestra participación en cada Eucaristía tiene que ir madurando. Lo primero que 
vemos cuando asistimos, a Misa es una comunidad reunida en Asamblea. 
Donde quiera que los seres humanos celebran algo, se reúnen, hablan, comparten y 
se despiden. En la Eucaristía, estos cuatro elementos constituyen las cuatro partes del ritual: 
Ritos Iniciales, Liturgia de la Palabra, Liturgia Eucarística y Rito de Despedida. 
Entrar en Asamblea litúrgica, formar parte de ella, es un don que se nos hace, pero 
también una tarea, algo que requiere el esfuerzo y la generosidad de todos.

La Asamblea se reúne para compartir. Pan y vino sirven para invitar y comer juntos, 
para compartir. Son signos de fraternidad, la cual tiene como fundamento la comunión de 
todos con el Cuerpo y Sangre de Cristo. 
Participar en la Eucaristía es estar dispuesto a compartir la vida y los bienes. Vivir 
la Eucaristía es hacerse siervo de los demás, vivir la vida como servicio. Jesús es nuestro 

mayor ejemplo, al lavar los pies de sus discípulos: 

3) Desarrollo del Tema

Elementos de la Eucaristía
Ministro, sujeto, materia y forma.


El ministro del sacramento de la Eucaristía es el sacerdote, quien en memoria de Jesucristo, consagra el pan y el vino, siguiendo el mandato de Jesús: "Hagan esto en memoria mía".

El sujeto del sacramento de la Eucaristía es cualquier persona que haya sido bautizada y que cumpla con las condiciones necesarias para recibir la Comunión:
o Estar en amistad con Dios, en estado de gracia, sin pecados mortales no confesados.
o No haber tomado alimento una hora antes de comulgar.

La materia del sacramento de la Eucaristía es pan de harina sin levadura y vino natural, extraído de la uva, tal y como los utilizó Jesucristo en la Última Cena.

La forma del sacramento de la Eucaristía es:
"Tomad y comed todos de él, porque esto es mi Cuerpo que será entregado por vosotros."
"Tomad y bebed todos de él, porque ésta es mi Sangre. Sangre de la alianza nueva y eterna que será derramada por vosotros y por muchos, para el perdón de los pecados."

Efectos de la Eucaristía:

1. La nutrición espiritual del alma, que consiste en el aumento de la gracia santificante, de las virtudes y de los dones del Espíritu Santo.

2. La íntima conjunción del alma con Cristo y con su cuerpo místico por la gracia y la caridad.

3. Disminución del fomento de la concupiscencia, o sea la inclinación al mal.


4. La resurrección gloriosa de los cuerposQuien come mi carne y bebe mi sangre tiene la vida eterna y yo lo resucitaré en el último día (Jn 6,55).

5. El perdón de los pecados veniales.

6. La dulzura y el deleite espiritual: este sacramento contiene un pan que en sí mismo encierra todo deleite.

Disposiciones para recibir la Eucaristía:
A) Estar en gracia.
B) Guardar el ayuno eucarístico.
C) Tener conocimiento claro de la grandeza del sacramento que se va a recibir.

Fiesta de Corpus Christi
Se originó en Bélgica en 1246 y 18 años después el Papa Urbano IV la extendió a toda la Iglesia. Se celebra el siguiente Jueves o Domingo después de la festividad de la Santísima Trinidad.

Comunión Espiritual
Es un ardiente deseo de recibir a Jesús en nuestro corazón. Al no poder recibirlo sacramentalmente, con el firme deseo se reciben las gracias de manera espiritual.

(Se sugiere proporcionar a nuestras asistentes la oración para hacer una comunión espiritual)

4) Compromiso
Asistir a la Misa dominical para recibir el alimento del Cuerpo y la Sangre de Cristo.





miércoles, 22 de enero de 2014

Tema 2.6 Formación Moral (Pedagógico)

Tema 2.6
La Reconciliación

1) Ideas Principales.
  • Es el sacramento instituido por Jesucristo para perdonar los pecados cometidos después del Bautismo.
  • La confesión es el sacramento en el cual, por medio de la absolución del sacerdote, recibimos el perdón de nuestros pecados si nos confesamos arrepentidos.


  • Con la confesión se obtienen dos gracias o favores especiales: 

      • 1. Nos devuelve o nos aumenta la gracia santificante: la amistad con Dios. 
      • 2. Nos da fuerzas especiales para evitar el pecado y rechazar las tentaciones. 
      • Los pasos necesarios para una buena confesión son:
       Examen de conciencia, dolor  de los pecados, propósito de enmienda, decir los pecados al confesor y cumplir la penitencia.
        • Los efectos del sacramento de la Penitencia son: la reconciliación con Dios y, por tanto, el perdón de los pecados; la reconciliación con la Iglesia; la recuperación del estado de gracia, si se había perdido; la remisión de la pena eterna merecida a causa de los pecados mortales y, al menos en parte, de las penas temporales que son consecuencia del pecado; la paz y la serenidad de conciencia y el consuelo del espíritu; el aumento de la fuerza espiritual para el combate cristiano. 

        2) ¿Qué quiero dar a entender?
        Que Dios es un Padre misericordioso que nos perdona los pecados y nos muestra sus brazos abiertos para volver a Él.

        3) Introducción

        Pocas cosas intrigan más a las personas como aquello que ocurre en la Confesión. Desde el secreto que debe guardar el sacer­dote, que se llama “sigilo sacramen­tal”, hasta lo que propiamente ocu­rre con el penitente, que entra car­gado con sus pecados y sale libe­rado de ellos.
        El Sacramento de la Reconciliación, al que también se le llama penitencia o Confesión, es uno de los rega­los más valiosos que Dios ofrece a sus hijos, para reconciliarlos con­sigo mismo y devolverles la gracia que han perdido. Ciertamente, junto a la celebración de la Eucaristía, las horas que dedico a la Confesión son de las que anticipo con mayor deseo. Es allí donde, actuando en el nombre propio de Nuestro Señor Jesucristo, escucho las intimidades del alma y perdono las ofensas cometidas con­tra el amor de Dios.
        Fue el mismo Jesucristo el que, al instituir el Sacramento de la Reconciliación, dispuso este medio para restablecer nuestra amistad con el Padre y así ayudarnos de una manera particular en la vigilancia de los actos de nuestra vida diaria.
        4) Desarrollo del Tema
        Jesús mismo quiso que la Iglesia continuase, con la fuerza del Espíritu Santo, su obra de curación y salvación de los hombres, incluso en sus propios miembros. Esta es la finalidad
        de los dos sacramentos de curación, del sacramento de la Penitencia y de la Unción de los
        enfermos. (cf. CIC 1421).

        El pecado es, ante todo, ofensa a Dios, ruptura de la comunión con Él. Al mismo tiempo, atenta contra la   comunión con la  Iglesia.
        Por eso la conversión  implica a la vez el perdón de Dios y la reconciliación con la Iglesia, que es lo que expresa y celebra litúrgicamente el sacramento de la penitencia y la reconciliación. (CIC 1440) El sacramento de la Reconciliación está constituido por el conjunto de tres actos realizados por el penitente y la absolución del sacerdote. Los actos del penitente son: el
        arrepentimiento, la confesión o manifestación de los pecados al sacerdote y el propósito de
        realizar la reparación y las obras de penitencia.
        ¿Quienes pueden recibir este sacramento?

        Todo bautizado está llamado a la penitencia y la reconciliación, en tanto la debilidad humana
        nos hace atentar contra la comunión con Dios y con la Iglesia. La confesión individual e
        íntegra de los pecados graves seguida de la absolución es el único medio ordinario para la
        reconciliación con Dios y con la Iglesia. Es importante acercarse a la parroquia y solicitar los
        horarios de atención del sacerdote, para prepararse convenientemente a recibir la
        Reconciliación.

        Ciertos pecados particularmente graves, como el aborto, están sancionados con la excomunión que es la pena Eclesiástica más severa y que impide la recepción de los Sacramentos o el ejercicio de actos eclesiásticos. La absolución de dichos pecados y la reincorporación al seno de la Iglesia, corresponde al Papa, al Obispo del lugar o a los sacerdotes autorizados por ellos. Sin embargo, en peligro de muerte, todo sacerdote puede absolver de cualquier pecado y levantar toda excomunión


        La materia es: el dolor de corazón o contrición, los pecados dichos al confesor de manera sincera e íntegra y el cumplimiento de la penitencia o satisfacción. Los pecados graves hay obligación de confesarlos todos.

        La forma son las palabras que pronuncia el sacerdote después de escuchar los pecados - y de haber emitido un juicio - cuando da la absolución: “Yo te absuelvo de tus pecados, en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo”.

        Oración  Preparatoria
        Jesús, yo creo que estás aquí, que me ves, que me oyes y que me quieres. Yo también te quiero aunque a veces te he ofendido con mis pecados. Te pido perdón. Se que me vas a perdonar, como el padre perdonó al hijo pródigo que volvió a él arrepentido. Ayúdame a reconocer mis pecados y a manifestarlos confiadamente al confesor, sin ocultar ninguno. Madre Mía, alcánzame la gracia de hacer una buena confesión.

         Acto de Contrición
        ¡Señor mío, Jesucristo! Dios y Hombre verdadero, Creador, Padre y Redentor mío; por ser Vos quien sois, Bondad infinita, y porque os amo
        sobre todas las cosas, me pesa de todo corazón haberos ofendido; también
        me pesa porque podéis castigarme con las penas del infierno. Ayudado de vuestra divina gracia, propongo firmemente nunca más pecar, confesarme
        y cumplir la penitencia que me fuere impuesta. Amén.

        Oración para después de la Confesión
        Muchas gracias, Jesús, por el abrazo de perdón que me has dado. Ahora se que me quieres más. Yo también te quiero más, y te prometo que voy a luchar para ser fiel amigo tuyo de verdad. Ayúdame a cumplir los propósitos que he hecho; y cuando no los cumpla, ayúdame a arrepentirme otra vez, y a volver de nuevo a Ti como el hijo pródigo. Amén.



         "La Confesión no debe ser solamente una esponja que borra, sino un tónico que robustece'.
        San Francisco de Sales.

        5) ¿De qué manera nos afecta esta realidad que estamos exponiendo?

        Lamentablemente hoy en día estamos viviendo un secularismo por el cual hemos sacado a Dios de nuestra vida. La falta de conciencia del pecado hace que no sintamos la necesidad de acercarnos al sacramento de la Reconciliación. Hay que aprender a hacer correctamente un examen de conciencia para reconocernos pecadores y pedirle perdón a Dios.

        Breve examen de conciencia 

        1. ¿He dudado o negado las verdades de la fe católica? 
        2. ¿He practicado la superstición o el espiritismo? 
        3. ¿Me he acercado indignamente a recibir algún sacramento? 
        4. ¿He blasfemado? ¿He jurado sin necesidad o sin verdad? 
        5. ¿Creo todo lo que enseña la Iglesia Católica? 
        6. ¿Hago con desgana las cosas que se refieren a Dios? 
        7. ¿He faltado a Misa los domingos o días festivos? ¿He cumplido los días 
        de ayuno y abstinencia? 
        8. ¿He callado en la confesión por vergüenza algún pecado mortal? 
        9. ¿Manifiesto respeto y cariño a mis padres y familiares? 
        10. ¿Soy amable con los extraños y me falta esa amabilidad en la vida de 
        familia? 
        11. ¿He dado mal ejemplo a las personas que me rodean? ¿Les corrijo con 
        cólera o injustamente? 
        12. ¿Me he preocupado de la formación religiosa y moral de las personas 
        que viven en mi casa o que dependen de mí? 
        13. ¿He fortalecido la autoridad de mi cónyuge, evitando reprenderle, 
        contradecirle o discutirle delante de los hijos? 
        14. ¿Me quejo delante de la familia de la carga que suponen las 
        obligaciones domésticas? 
        15. ¿Tengo enemistad, odio o rencor contra alguien? 
        16. ¿Evito que las diferencias políticas o profesionales degeneren en 
        indisposición, malquerencia u odio hacia las personas? 
        17. ¿He hecho daño a otros de palabra o de obra? 
        18. ¿He practicado, aconsejado o facilitado el grave crimen del aborto? 
        19. ¿Me he embriagado, bebido con exceso o tomado drogas? 
        20. ¿He descuidado mi salud? ¿He sido imprudente en la conducción de 
        vehículos? 
        21. ¿He sido causa de que otros pecasen por mi conversación, mi modo de 
        vestir, mi asistencia a algún espectáculo o con el préstamo de algún libro 
        o revista? ¿He tratado de reparar el escándalo? 

        22. ¿He sido perezoso en el cumplimiento de mis deberes? ¿Retraso con 
        frecuencia el momento de ponerme a trabajar o a estudiar? 
        23. ¿He aceptado pensamientos o miradas impuras? 
        24. ¿He realizado actos impuros? ¿Solo o con otras personas? ¿Del mismo 
        o distinto sexo? ¿En cuántas ocasiones? ¿Hice algo por impedir las 
        consecuencias de esas relaciones? 
        25. ¿Antes de asistir a un espectáculo o de leer un libro, me entero de su 
        calificación moral? 
        26. ¿He usado indebidamente el matrimonio? ¿Acepto y vivo conforme a 
        la doctrina de la Iglesia en esta materia? 
        27. ¿He tomado dinero o cosas que no son mías? ¿En su caso, he 
        restituido o reparado? 
        28. ¿He engañado a otros cobrando más de lo debido? 
        29. ¿He malgastado el dinero? ¿Doy limosna según mi posición? 
        30. ¿He prestado mi apoyo a programas de acción social o política 
        inmorales o anticristianos? 
        31. ¿He dicho mentiras? ¿He reparado el daño que haya podido seguirse? 
        32. ¿He descubierto, sin causa justa, defectos graves de otras personas? 
        33. ¿He hablado o pensado mal de otros? ¿He calumniado? 
        34. ¿Soy ejemplar en mi trabajo? ¿Utilizo cosas de la empresa en 
        provecho propio o faltando a la justicia? 
        35. ¿Estoy dispuesto a sufrir una merma en mi reputación profesional 
        antes de cometer o cooperar formalmente en una injusticia? 
        36. ¿Me preocupo de influir --con naturalidad y sin respetos humanos-- 
        para hacer más cristiano el ambiente a mí alrededor? ¿Sé defender a 
        Cristo y a la doctrina de la Iglesia? 
        37. ¿Hago el propósito de plantearme más en serio mi formación cristiana 

        y mis relaciones con Dios? 

        6) Compromiso.

        Acercarme arrepentida al Sacramento de la Reconciliación. Si mi condición de vida no me permite hacerlo buscaré a un sacerdote para recibir una dirección espiritual. (Explicar la diferencia)

        viernes, 17 de enero de 2014

        Tema 2.5 La Confirmación (Pedagógico)

        Tema 2.5
        La Confirmación

        1) Ideas Principales.
        El sacramento de la Confirmación perfecciona la gracia bautismal, y nos da la fortaleza de Dios para ser firmes en la fe y en el amor a Dios y al prójimo.
        Nos da también audacia para cumplir el derecho y el deber, que tenemos por el bautismo, de ser apóstoles de Jesús, para difundir la fe y el Evangelio, personalmente o asociados, mediante la palabra y el buen ejemplo.
        ¿Qué es la confirmación?
        Es el sacramento que perfecciona la gracia bautismal fortaleciéndonos en la fe y haciéndonos soldados y apóstoles de Cristo.
        ¿Cuándo se debe recibir la confirmación?
        Se debe recibir la confirmación cuando se ha llegado al uso de razón, o antes, si hay peligro de muerte.La Iglesia propone que se reciba después del Sacramento de la Eucaristía.
        ¿Cómo se debe recibir la confirmación?
        Se debe recibir la confirmación en estado de gracia y con la preparación conveniente.
        ¿Quién puede confirmar?
        Puede confirmar el obispo, y en algunos casos especiales los sacerdotes delegado por el obispo.
        2) ¿Qué quiero dar a entender?
        Que es a través de este Sacramento como confirmamos nuestro amor por Cristo y nuestro compromiso de seguirlo.
        3) Introducción.
        ¿Para qué confirmarse? Para llevar a plenitud el Bautismo y, así, ser realmente testigos de Jesucristo en nuestro mundo. Se trata de recibir más plenamente al Espíritu Santo, don gratuito de Dios, que quiere unirnos así a su vida misma, transformarnos con su presencia y hacernos libres para poder caminar siguiendo a Jesús. El don que Dios concede en la Confirmación es el Espíritu Santo, que es don de Dios Amor, que libera y recrea nuestra libertad. “Donde está el Espíritu del Señor, allí está la libertad” (2Co 3,17). Qué alegría saber que esta es la posibilidad que el Espíritu genera en nosotros: ser realmente libres. A veces escuchamos que la fe cristiana quiere recortar nuestra libertad, nuestros deseos más profundos de felicidad. Nada más alejado de la realidad de la fe. La Iglesia, cuando en la fiesta de Pentecostés habla del Espíritu Santo, dice: “mira el vacío del hombre / si tú le faltas por dentro; / mira el poder del pecado / cuando no envías su aliento”(secuencia del día de Pentecostés). Así, el sacramento de la Confirmación perfecciona el don del Espíritu Santo recibido en el Bautismo y hace capaz, a quien lo recibe, de dar testimonio de Cristo. Es decir, hace más plenamente cristiano, pues el Espíritu Santo nos lleva a crecer, a parecernos más a Jesucristo. Porque, como ya he dicho, para llegar a ser cristiano no basta con saber cosas de Jesús, es preciso entrar en contacto con Él, es necesario dejarse alcanzar por Aquel que lo hace presente hoy entre nosotros, el Espíritu.

        4) Desarrollo del Tema.

        ¿Que es el Sacramento de la Confirmación?

        ¿Que es el Sacramento de la Confirmación?
        ¿Que es el Sacramento de la Confirmación?

        El sacramento de la Confirmación es uno de los tres sacramentos de iniciación cristiana. La misma palabra, Confirmación que significa afirmar o consolidar, nos dice mucho.

        En este sacramento se fortalece y se completa la obra del Bautismo. Por este sacramento, el bautizado se fortalece con el don del Espíritu Santo. Se logra un arraigo más profundo a la filiación divina, se une más íntimamente con la Iglesia, fortaleciéndose para ser testigo de Jesucristo, de palabra y obra. Por él es capaz de defender su fe y de transmitirla. A partir de la Confirmación nos convertimos en cristianos maduros y podremos llevar una vida cristiana más perfecta, más activa. Es el sacramento de la madurez cristiana y que nos hace capaces de ser testigos de Cristo.

        El día de Pentecostés – cuando se funda la Iglesia – los apóstoles y discípulos se encontraban reunidos junto a la Virgen. Estaban temerosos, no entendían lo que había pasado – creyendo que todo había sido en balde - se encontraban tristes. De repente, descendió el Espíritu Santo sobre ellos –quedaron transformados - y a partir de ese momento entendieron todo lo que había sucedido, dejaron de tener miedo, se lanzaron a predicar y a bautizar. La Confirmación es “nuestro Pentecostés personal”. El Espíritu Santo está actuando continuamente sobre la Iglesia de modos muy diversos. La Confirmación – al descender el Espíritu Santo sobre nosotros - es una de las formas en que Él se hace presente al pueblo de Dios.

        Institución

        El Concilio de Trento declaró que la Confirmación era un sacramento instituido por Cristo, ya que los protestantes lo rechazaron porque - según ellos - no aparecía el momento preciso de su institución. Sabemos que fue instituido por Cristo, porque sólo Dios puede unir la gracia a un signo externo.

        Además encontramos en el Antiguo Testamento, numerosas referencias por parte de los profetas, de la acción del Espíritu en la época mesiánica y el propio anuncio de Cristo de una venida del Espíritu Santo para completar su obra. Estos anuncios nos indican un sacramento distinto al Bautismo. El Nuevo Testamento nos narra como los apóstoles, en cumplimiento de la voluntad de Cristo, iban imponiendo las manos, comunicando el Don del Espíritu Santo, destinado a complementar la gracia del Bautismo. “Al enterarse los apóstoles que estaban en Jerusalén de que Samaria había aceptado la Palabra de Dios, les enviaron a Pedro y a Juan. Estos bajaron y oraron por ellos para que recibieran al Espíritu Santo; pues todavía no había descendido sobre ninguno de ellos; únicamente habían sido bautizados en nombre del Señor Jesús. Entonces les imponían las manos y recibían al Espíritu Santo”. (Hech. 8, 15-17;19, 5-6).

        El Signo: La Materia y la Forma

        Dijimos que la materia del Bautismo, el agua, tiene el significado de limpieza, en este sacramento la materia significa fuerza y plenitud. El signo de la Confirmación es la “unción”. Desde la antigüedad se utilizaba el aceite para muchas cosa: para curar heridas, a los gladiadores de les ungía con el fin de fortalecerlos, también era símbolo de abundancia, de plenitud. Además la unción va unido al nombre de “cristiano”, que significa ungido.

        La materia de este sacramento es el “santo crisma”, aceite de oliva mezclado con bálsamo, que es consagrado por el Obispo el día del Jueves Santo. La unción debe ser en la frente.

        La forma de este sacramento, palabras que acompañan a la unción y a la imposición individual de las manos “Recibe por esta señal de la cruz el don del Espíritu Santo” (Catec. no. 1300) . La cruz es el arma conque cuenta un cristiano para defender su fe.



        Efectos y Carácter
        Por lo antes mencionado, podemos entender que en la Confirmación el efecto
        principal es que recibimos al Espíritu Santo en plenitud. (Cfr. Catec. no. 1302). Otros
        frutos son:
        · Recibimos una fuerza especial del Espíritu Santo, tal como la recibieron los apóstoles
        el día de Pentecostés, que nos permite defender y difundir nuestra fe con mayor fuerza
        y ser verdaderos testigos de Cristo.
        Manual de Sacramentos
        25
        · Nos une profundamente con Dios, con Cristo y con la Iglesia.
        · Imprime en el alma un carácter indeleble y otorga un crecimiento de la gracia
        bautismal.
        · Arraiga más profundamente la filiación divina
        · Aumenta en nosotros los dones del Espíritu Santo que son:
        - Sabiduría, que nos comunica el gusto por las cosas de Dios. Por medio de él
        vamos gustando de todo lo relacionado con Dios.
        - Inteligencia, que nos comunica el conocimiento profundo de las verdades de fe, es
        decir, la capacidad para entender las cosas de Dios.
        - Ciencia, que nos enseña la recta apreciación de las cosas terrenales, entender las
        cosas de la tierra tal y cómo son.
        - Consejo, nos ayuda para formar un juicio sensato, acerca de las cosas prácticas
        de la vida cristiana.
        - Fortaleza, nos da fuerzas para trabajar con alegría por Cristo, haciendo siempre el
        bien a los demás, tal como Él lo hizo.
        - Piedad, que nos relaciona con Dios como Padre, ya que Él es el ser más perfecto
        que existe en el universo y es nuestro Creador y nos ayuda a aceptar la autoridad
        que tienen algunos sobre nosotros.
        - Temor de Dios, nos lleva a tener miedo de ofender a Dios, por amor a Él y por lo
        tanto, a tratar de no pecar para no alejarnos de Él.
        · Nos une con un vínculo mayor a la Iglesia.
        · Aumenta la gracia santificante.
        · Se recibe la gracia sacramental propia que es la fortaleza.
        · Imprime carácter, la marca espiritual indeleble, que nos marca con el Espíritu de Cristo.

        Es un sumergirse de manera más profunda en la comunidad cristiana.

        5) Compromiso.
        Esta semana haré un pequeño balance por las noches antes de dormir y me preguntaré si este día dejé que el Espíritu Santo actuara en mi vida.

        martes, 7 de enero de 2014

        Tema 2.4 Formación Moral Básico (Pedagógico)

        Tema 2.4
        El Bautismo

        1) Ideas Principales.
        • Por el bautismo somos liberados del pecado y nacemos a la vida espiritual, una nueva vida en Cristo, somos incorporados a la Iglesia y hechos partícipes de su misión como reyes, sacerdotes y profetas.
        • Por el bautismo nos convertimos en Hijos de Dios y participamos de la vida divina del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo.
        • La vida de Dios es una vida donde hay amor, belleza, armonía, progreso y paz.
        • Por el bautismo recibimos en herencia la vida eterna.
        • Cristo instituyó el Sacramento del Bautismo en el momento mismo en que él fue bautizado por Juan en Bautista.
        2) ¿Qué quiero dar a entender?
        Comprender la importancia del sacramento del Bautizo y hacer conciencia de los compromisos cristianos que adquirimos a través de recibir la gracia santificante.

        3) Introducción.

        ¿Sabías que en Argentina un grupo de personas se quieren desbautizar?
        ¿Será ésto posible?


        El  primer sacramento de la iniciación cristiana recibe el nombre de Bautismo, en razón del rito central con el cual se celebra.
        Bautizar significa “sumergir” en el agua.
        Quien recibe el Bautismo es sumergido en la muerte de Cristo y resucita con Él “como una nueva criatura”
        Se llama también “baño de regeneración y renovación en el Espíritu Santo” e “iluminación” pues el bautizado es “hijo de la luz”. Los ministros ordinarios del
        Bautismo son el obispo y el presbítero: en la Iglesia latina también el diácono.
        En caso de necesidad cualquiera puede bautizar, siempre que tenga la intención de hacer lo que hace la Iglesia.
        Debe derramar agua sobre la cabeza del candidato y pronunciar la fórmula trinitaria bautismal.


        El Bautismo perdona el pecado original, todos los pecados personales
        y todas las penas debidas al pecado.
        Hace participar de la vida divina trinitaria
        mediante la gracia santificante.
        Da la gracia de la justificación que incorpora a Cristo y a su Iglesia.
        Otorga las virtudes teologales y los dones del
        Espíritu Santo.

        4) Desarrollo del Tema.

        El Signo: La Materia y la Forma

        El Concilio de Trento declaró como dogma de fe, que la materia del Bautismo es el agua natural, porque así lo dispuso Cristo y así lo hacían los apóstoles. Esta definición fue necesaria porque en ese momento, había que rebatir la doctrina de Lutero, que decía que se podía utilizar cualquier líquido. Además, existen unos argumentos que nos demuestran su conveniencia: sabemos que el agua lava el cuerpo, por lo que es la materia adecuada para lavar los pecados. Por otro lado es fácil de encontrar y debido a la importancia de este sacramento su materia lógica es el agua. 

        El Bautismo puede llevarse a cabo por infusión – cuando se derrama el agua sobre la cabeza – o por inmersión – sumergiendo al bautizado en el agua -.

        Para su validez se debe de derramar el agua al mismo tiempo que se dicen las palabras que constituyen la forma y el agua debe de correr sobre la cabeza. Salvo en caso de necesidad, como podría ser el bautismo de un feto, - aún con vida - que podría ser en cualquier parte del cuerpo.

        Las palabras que constituyen la forma son: “Yo te bautizo en el nombre del Padre, y del Hijo y del Espíritu Santo”. En estas palabras están representadas las partes que son esenciales, tales como: el ministro “Yo”, el sujeto “te”, bautizo, la acción que se realiza, la mención de la Santísima Trinidad y la clara distinción de las Tres Personas divinas.

        Rito y Celebración

        El bautismo, tiene muchos signos, además del signo esencial, constituido por la materia y la forma y éstos nos llevan a seguir un rito:

        El sentido de la gracia del Sacramento del bautismo aparece claramente en los ritos de su celebración. Cuando se participa atentamente en los gestos y las palabras de esta celebración, los fieles profundizan en lo que este sacramento significa y se percatan en lo que se realiza en el bautizado.

        Cada uno de los signos posee un sentido muy determinado, así por ejemplo:

        La celebración comienza con la señal de la cruz, que nos indica la marca de Cristo sobre el que le va a pertenecer y significa la gracia adquirida por la Cruz de Cristo.

        El anuncio de la Palabra de Dios, es decir, las lecturas, que da luces sobre la verdad revelada a los "candidatos" y a la asamblea; y suscita en todos la respuesta de la fe. En efecto, el bautismo es "el Sacramento de la fe" por ser la entrada sacramental en la vida de la fe. El anuncio de la Palabra de Dios, nos invita a vivir este "Sacramento de la fe".

        Puesto que por el bautismo somos "liberados del pecado y del que nos tienta, el Diablo", se pronuncian uno o varios exorcismos sobre eel "candidato". Este es ungido con el óleo de los catecúmenos, o bien el celebrante le "impone las manos", y el "candidato" renuncia explícitamente a Satanás. Así preparado, puede confesar la fe de la Iglesia, a la cual será confiado" por el bautismo. (Rm. 6,17 ).

        El agua bautismal es entonces consagrada mediante una oración en el mismo momento o utilizar la de la noche pascual. La Iglesia pide a Dios que, por medio de su Hijo, el poder del Espíritu Santo descienda sobre esta agua, a fin de que los que sean bautizados con ella "nazcan del agua y del Espíritu”. (Jn. 3,5)

        El agua bautismal es signo de un nuevo nacimiento, en el Espíritu. El inicio a la vida de gracia, y a la pertenencia del Pueblo de Dios.

        Pero como todo sacramento posee un rito esencial,el signo más importante. Y este rito esencial del sacramento: el bautismo propiamente dicho. El bautismo es realizado de la manera más significativa mediante la triple inmersión en el agua bautismal, o derramando tres veces agua sobre la cabeza del candidato. Al mismo tiempo que se pronuncia la forma. Las palabras que pronuncia el ministro son: " Fulano....... yo te bautizo en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo". 

        La unción con el santo crisma, óleo perfumado y consagrado por el obispo, significa el don del Espíritu Santo al nuevo bautizado. Ha llegado a ser un cristiano, es decir, "ungido" por el Espíritu Santo, incorporado a Cristo, que es ungido Sacerdote, profeta y rey. Literalmente ungido significa “persona consagrada" y en este caso es a Dios.

        En la Liturgia de las Iglesias de Oriente, esta unción postbautismal es el sacramento de la crismación (Confirmación). 

        La vestidura blanca simboliza que el bautizado se ha "revestido de Cristo" (Ga. 3,27); que ha resucitado con Cristo a la vida de la gracia.

        El cirio que se enciende en el "cirio pascual", significa que Cristo ha iluminado al neófito. En Cristo, los bautizados son: "la luz del mundo" (Mt.5,14) (Flp. 2,15).

        El nuevo bautizado es ahora hijo de Dios. Por lo tanto, ya puede decir la oración de los hijos de Dios: "el Padrenuestro". Sólo los bautizados podemos llamar "Padre" a Dios.

        La bendición solemne cierra la celebración del "bautismo". En el bautismo de los niños recién nacidos, la bendición de la madre ocupa un lugar especial.

        5) ¿De qué manera afecta a mi comunidad el no hacer conciencia de las gracias que otorga el sacramento del bautismo?

        Vivir sin la conciencia de la presencia de Dios en nuestras vidas es como estar muerto en vida. Hay que renovar nuestras promesas bautismales para orientar nuestra vida hacia Dios.

        6) Compromiso.
        Vamos a hacer una renovación de nuestros compromisos bautismales.


        sábado, 4 de enero de 2014

        F.HUMANA BASICO 2.9 PEDAGOGICO

        TEMA 2.9   LA MUJER EN EL EMBARAZO


        IDEA PRINCIPAL :
        El embarazo debe ser un acontecimiento feliz para toda madre.

        INTRODUCION
        Conocer los pasos que debe seguir una mujer embarazada para llevar a feliz término su embarazo

        DESARROLLO DEL TEMA

        ¿Cuál es la mejor edad para embarazarse ?
        Entre los 18 y los 35 años la mujer ha completado su desarrollo y está fisiológicamente madura para nutrir a un bebé en desarrollo.

        Pero también es muy importante la madurez emocional y la estabilidad familiar que garantice la acogida del bebé con amor.

        Independientemente de la edad, es importante buscar atención médica tan pronto como se sepa que está embarazada.

        ¿Cuáles son los principales signos de embarazo ?

        La ausencia de menstruación

        Dolor en las glándulas mamarias

        Somnolencia

        Fatiga

        Náusea, vómito

        Frecuencia al orinar


        Sin embargo, cada mujer es única y cada embarazo también. Ante la mínima sospecha de embarazo, es conveniente realizar alguna prueba que lo confirme o acudir con su médico


        ¿En qué consisten las pruebas de embarazo ?

        Son pruebas químicas realizadas en muestras de sangre o de orina para confirmar la existencia de un embarazo

        Pueden realizarse en laboratorios o en casa

        Algunas se pueden hacer a tan solo unos días de retraso en la menstruación
        Tan pronto se confirme el embarazo, es importante iniciar los cuidados prenatales.
        ¿Qué son los cuidados prenatales ?

        üSon los cuidados de salud que la mujer recibe antes de que nazca el bebé.

        üCuando inician pronto estos cuidados, tienden a tener menos problemas y dar a luz bebes mas sanos

        üDurante el primer trimestre, el bebé se desarrolla muy rápido.

        Todos los órganos principales se forman durante las primeras 12 semanas


        ¿Cuáles son los cuidados prenatales ?

        üAlimentación

        üCuidados especiales

        üTipo e intensidad del ejercicio

        üCuidado en el aumento de peso

        Ayudan a asegurar un bebé saludable y un embarazo confortable y seguro

        Primera visita al médico:

        Suele ser más larga.

        Interrogatorio sobre: edad de primera menstruación, regularidad y sangrado durante sus períodos, embarazos previos, abortos o amenazas.

        Antecedentes médicos: hipertensión arterial, problemas cardiovasculares, enfermedades pulmonares, hepáticas, renales, antecedentes de hemorragias, mala coagulación, cirugías y transfusiones.

        Tipo de alimentación y estilo de vida.

        Examen clínico de la paciente: peso, estatura, presión arterial, pulso,     temperatura, examen pélvico.

        Exámenes de laboratorio: biometría hemática, glucosa en sangre, factor RH, VDRL, etc.

        Visitas posteriores al médico:

        Conviene acudir a una revisión cada mes hasta el 6º. mes.

        A partir del 7º. mes, cada 15 días.

        Durante el último mes, cada semana.

        En cada visita se checa: aumento de peso, presión arterial, pulso,  mediciones de la matriz, latidos cardíacos del bebé y se palpará su tamaño.

        Algunas pruebas especiales:

        Algunas veces, por situaciones especiales, el médico solicita algunos exámenes especiales que no son de rutina, que pueden ayudar a tomar decisiones o a prevenir problemas.

        Es conveniente cuestionar al doctor sobre la utilidad de estas pruebas y sus potenciales complicaciones.

        Una prueba muy usual es el ultrasonido que permite al médico determinar la posición y tamaño del bebe, estimar su fecha de nacimiento, la madurez de la placenta y detectar algunas anormalidades.

        Cómo estimar la fecha aproximada de nacimiento:

        Por cálculo: fecha de la última menstruación + 9 meses + 7 días. Este cálculo es aproximado y puede resultar dos semanas antes o dos semanas después (36 a 40 semanas).

        Por estudios de ultrasonido: cada vez se utilizan más y son más exactos.
         
        Aumento de peso durante el embarazo:
        Un aumento de peso adecuado evita riesgos y complicaciones para la madre y el bebé.
        Ayuda a asegurar un buen peso del bebé al nacer (de 3 a 3 ½ kilos)
        Se recomienda un aumento de peso entre 9 y 14 kgs., dependiendo de cada mujer.
        El aumento de peso ideal es de 1 ½ kilos durante los 3 primeros meses, y después de 1 a 1 ½ kilos por mes.
        Con una alimentación adecuada y ejercicio, la mayoría de las mujeres deben volver a su peso previo en un período de 3 a 6 meses después del parto.
         
        El embarazo es un estado biológico natural
        y debe ser un período de felicidad y de salud.
        Cambios de estilo de vida durante el embarazo:
        Ø Relaciones sexuales:
        Para la mujer saludable hay pocas restricciones.
        Es natural que haya cambios en el deseo sexual.
        Al crecer el abdomen las relaciones sexuales pueden ser un poco incómodas.
        Generalmente no hay problema en tenerlas hasta el 9º. mes.
        En algunas mujeres, sobre todo con amenazas de aborto o antecedentes de partos prematuros, pueden quedar restringidas al inicio o al final del embarazo.
        Es conveniente consultarlo con su médico.
         
        Tabaquismo:
        No fumar es uno de los mejores regalos para tu bebé:
        Fumar durante el embarazo está asociado con:
              - bajo peso del bebé al nacer
              - nacimientos prematuros, abortos y otras complicaciones.
        Fumar durante la lactancia no es conveniente ya que la nicotina pasa al bebé a través de la leche.
        Mayor incidencia del síndrome de muerte repentina durante la infancia de niños con madres que fumaron durante el embarazo o lactancia.
        Mayor incidencia a desarrollar problemas respiratorios en la niñez temprana.
        Desarrollo físico ligeramente retrasado.
        Cuando ambos padres fuman después de nacido el bebé aumenta el riesgo de bronquitis o neumonía.
         
        Alcohol:
        Cualquier cantidad de alcohol puede ser peligrosa para el desarrollo del bebé.
        Se recomienda no ingerir bebidas alcohólicas durante el embarazo o cuando se considera su posibilidad (porque aumenta el riesgo de malformaciones congénitas).
        Mayor riesgo de abortos y bajo peso del bebé.
        Riesgo de un bebé con síndrome de alcohol, con problemas físicos y mentales severos.
        Muchas medicinas para la tos y resfriado contienen alcohol.
        El alcohol en el vino, cerveza o licores es una rica fuente de calorías, pero no constituyen una buena nutrición.
        El alcohol se puede transmitir a través de la lactancia.   
         
        ØMedicamentos:
        Durante el embarazo solamente tomar los medicamentos prescritos por el médico, especialmente durante el primer trimestre.
        La mayoría de los medicamentos son capaces de traspasar la placenta y tener algún efecto en el bebé.
         
        Cuidar a la madre durante el embarazo es en beneficio de todos. Procuremos que este sea siempre un acontecimiento feliz.